CIUDAD DE MÉXICO — En Estados Unidos el mercado conocido como pink market vale 660,000 millones de dólares (mdd), mientras que en México representa poco más de 4,663 mdd, según un análisis sobre el mercado gay en el país, realizado por De La Riva.
Johnnie Walker, Lufthansa y Avis son algunas de las empresas que a nivel internacional se han apuntado en este segmento, el cual contiene características por demás atractivas, entre éstas "gustan de las marcas e invierten más que el heterosexual en aspectos como su cuidado personal", menciona la directora de De la Riva Investigación Estratégica, Gabriela de la Riva.
Uno de los principales atractivos de este sector son sus hábitos de compra y su gran movilidad social. "Generalmente están a la cabeza en las tendencias, les gusta lo trendy, de ahí que destinan un gran porcentaje a ropa, viajes, restaurantes y todo aquello que les dé un toque de vanguardia", indica el director de Babylon Tours, agencia especializada en turismo Lésbico, Gay, Bisexual y Transexual (LGBT), Jaime Rogel Quintana.
Gabriela de la Riva indica que este mercado gusta de estar informado, "la tecnología es su mejor aliado. Las mujeres lésbicas superan a las heterosexuales respecto al uso de Internet". La experta destaca su interés por los productos o servicios con cierta sofisticación, por ejemplo el concepto orgánico o fusión.
"Este sector siempre debe ir un paso adelante, desde el momento en que anuncia su preferencia sexual, de ahí su búsqueda por lo innovador", expresa la entrevistada. Algunas parejas gays se insertan en el mercado dink (double income no kids), lo cual significa que el doble ingreso lo destinan a satisfacer sus necesidades personales y no a la manutención de una familia.
"En el país marcas como Bacardí, American Express, Levi´s y Blue Shot se han promocionado en los principales lugares de encuentro gay, porque han detectado un nicho de oportunidad al dirigirse de forma directa al consumidor homosexual", señala un estudio de la Asociación Mexicana de Agencias de Investigación de Mercado y Opinión Pública.
"En términos de publicidad, a veces cuando una compañía tienen una idea y quieren medir su respuesta, toma al segmento gay como un termómetro efectivo para conocer el impacto que tendrá ese producto en el mercado", menciona Gabriela de la Riva.
martes, 8 de junio de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario